KNOCKEMSTIFF
Escrita por Donald Ray Pollock fue publicada en 2008 está formada por una colección de relatos (dieciocho en total) que nos muestran las bajezas del ser humano de una manera cruda, directa, y salvaje.
Personajes: Varios.
FICHA:
Editorial: Libros del Silencio
Formato: Tapa Blanda
Año: 2008
Páginas: 304
Precio: 20 euros
¿Quién cojones va a ir a esa aldeucha -por ponerle un nombre decente que por cierto mejora al que tiene- después de leer este libro de relatos de Donald Ray Pollock? La respuesta es evidente algunos drogatas, putas, violadores, chorizos de poca monta y tarados mentales que no tengan ni idea de donde se meten, y es que suponiendo que Knockemstiff tenga alcalde o algo parecido lo que nunca debería hacer es nombrar hijo predilecto del villorrio al autor de semejante "panegírico". Que después Pollock nos dice en la última página que Knockemstiff no tiene nada que ver con lo que describe, que está muy agradecido a ese villorrio y todo lo que quiera, pero joder solo hay que ver algunas fotos que de allí se pueden encontrar por la red
para reconocer como verdadero lo escrito por el autor en sus relatos. Cierto es por otro lado que en los últimos años la situación en la zona ha mejorado tal y como nos relata en el último cuento y que incluso ahora gracias al éxito que ha tenido esta compilación de relatos son numerosos los turistas que llegan allí. Pero este último hecho no hace más que confirmar mi primera afirmación: que allí solo irán drogatas, ladrones y demás; para prueba un botón el cartel de carretera perforado por balas que sirvió de portada para la edición estadounidense donde aparecía el nombre de Knockemstiff fue robado, ¿tengo o no tengo razón?
Imagino que se habrán hecho una idea de lo que podemos encontrar en este libro. Relatos bestiales con asesinatos, violaciones, palizas, drogas (no de las que consumen los ricos, sino la basura que consumen los más pobres de entre los pobres), chabolas, borrachos y sobretodo DESGRACIADOS. No aparece un solo personaje en todo el libro que parezca feliz (a menos que esté snifando vapores, violando o apalizando a alguien). ¿Y quien va a leer un libro con unos personajes así? Pues cualquiera que no sea demasiado sensiblero. No nos encontramos con relatos que describan escenas muy duras pero los personajes lo convierten en brutal a través de las descripciones que nos hacen de sus vidas cotidiana y este es el auténtico acierto de Pollock.
La edición del libro corre a cargo de Libros del Silencio (que por cierto acaba de cerrar las puertas -una pena porque han editado libros tan buenos como éste que reseñamos hoy, El Diablo a todas horas del mismo autor, y sobre todo La Familia Mashber de Der Nister y Las Desventuras del Príncipe Sternenhoch de Ladislav Klíma que reseñaremos en otra ocasión-) y cuenta en sus primeras páginas de un mapa en el que nos sitúa la acción:
Son dieciocho los relatos que componen el libro los hay excelentes y muy buenos pero ninguno malo,- algo que me ha extrañado si comparo mi experiencia con Borges donde algunos me parecen excelentes y otros unos auténticos bodrios- que lo único que no tienen en común son los personajes -algunos aparecen en unos relatos y más tarde vuelven a aparecer-. Podríamos decir que tiene una estructura circular en la que los personajes que aparecen en el primer relato (excepcional, mientras lo lees parece que estás viendo un combate de boxeo que hace que te suba las pulsaciones a 150) vuelven a aparecer en el último pasados muchos años mostrándonos que en Knockemstiff el tiempo pasa pero todo sigue igual.
Algunos personajes que pertenecen a los más bajos fondos de la sociedad parecen filósofos de la vida en algunos momentos y dicen frases tan lapidarias como ésta:
"- Es lo que digo siempre Duane -dijo por fin con voz solemne-, un coño es un coño. Todos son buenos; lo que pasa es que algunos son mejores que otros" .
Sabio consejo de un padre a un hijo... Puede parecer un momento machista del relato pero lo que realmente esconde esta frase que le dice el padre al hijo es la resignación en la que viven en Knockemstiff llevado al último extremo, sabedores estos personajes de que ocupan el último escalón de la sociedad reconocen que la única opción que les queda para follar (que es de lo que trata este relato) es hacerlo con cualquier mujer por muchos defectos que tengan puesto que no pueden aspirar a más.
Por supuesto que aunque Pollock no haga mención de ello, imagino que las mujeres pensarían igual de los hombres de Knockemstiff...
En otros relatos los personajes nos muestra el desprecio hacia la cultura. Knockemstiff es un villorio racista y homófobo; pues bien en un momento dado un padre que teme que su hijo sea marica le espeta así a bocajarro:
"Tienes que dejar de leer libros- le aconsejó una mañana mientras estaban sentados a la mesa de la cocina. El viejo tenía una pinta espantosa; saltaba a la vista que acababa de tener una pesadilla chunga-. Empieza a ver más la tele."
Si el chico era marica lo era porque leía. En definitiva no solo había borrachos, violadores, y drogadictos es que además eran una caterva de analfabetos -claro que quizá ese era el motivo de que esos personajes fueran como eran-.
Y por último hay excelentes momentos humorísticos y es que estos DESGRACIADOS (y lo pongo en mayúscula porque lo eran con todas las letras) al menos nos hacen reír a ratos:
"Se imaginó en el manicomio que había sobre la colina de Athens, compartiendo una celda acolchada con el loco de su tío, intercambiando historias repugnantes sobre los viejos tiempos y discutiendo sobre quien la chupaba mejor, si Barbie o Ken".
Os dejo el teaser que realizó David Cauquil para el libro:
De estas veinticuatro imágenes dieciocho hacen referencia a los relatos podéis intentar adivinar de que va cada relato o aún más fácil podéis entrar en el siguiente enlace de David Cauquil pinchar sobre la imagen y leer unas breves palabras que hacen referencia al relato al que pertenece.
Leed el libro. No os defraudará.
Escrita por Donald Ray Pollock fue publicada en 2008 está formada por una colección de relatos (dieciocho en total) que nos muestran las bajezas del ser humano de una manera cruda, directa, y salvaje.
Personajes: Varios.
FICHA:
Editorial: Libros del Silencio
Formato: Tapa Blanda
Año: 2008
Páginas: 304
Precio: 20 euros
¿Quién cojones va a ir a esa aldeucha -por ponerle un nombre decente que por cierto mejora al que tiene- después de leer este libro de relatos de Donald Ray Pollock? La respuesta es evidente algunos drogatas, putas, violadores, chorizos de poca monta y tarados mentales que no tengan ni idea de donde se meten, y es que suponiendo que Knockemstiff tenga alcalde o algo parecido lo que nunca debería hacer es nombrar hijo predilecto del villorrio al autor de semejante "panegírico". Que después Pollock nos dice en la última página que Knockemstiff no tiene nada que ver con lo que describe, que está muy agradecido a ese villorrio y todo lo que quiera, pero joder solo hay que ver algunas fotos que de allí se pueden encontrar por la red
para reconocer como verdadero lo escrito por el autor en sus relatos. Cierto es por otro lado que en los últimos años la situación en la zona ha mejorado tal y como nos relata en el último cuento y que incluso ahora gracias al éxito que ha tenido esta compilación de relatos son numerosos los turistas que llegan allí. Pero este último hecho no hace más que confirmar mi primera afirmación: que allí solo irán drogatas, ladrones y demás; para prueba un botón el cartel de carretera perforado por balas que sirvió de portada para la edición estadounidense donde aparecía el nombre de Knockemstiff fue robado, ¿tengo o no tengo razón?
Imagino que se habrán hecho una idea de lo que podemos encontrar en este libro. Relatos bestiales con asesinatos, violaciones, palizas, drogas (no de las que consumen los ricos, sino la basura que consumen los más pobres de entre los pobres), chabolas, borrachos y sobretodo DESGRACIADOS. No aparece un solo personaje en todo el libro que parezca feliz (a menos que esté snifando vapores, violando o apalizando a alguien). ¿Y quien va a leer un libro con unos personajes así? Pues cualquiera que no sea demasiado sensiblero. No nos encontramos con relatos que describan escenas muy duras pero los personajes lo convierten en brutal a través de las descripciones que nos hacen de sus vidas cotidiana y este es el auténtico acierto de Pollock.
La edición del libro corre a cargo de Libros del Silencio (que por cierto acaba de cerrar las puertas -una pena porque han editado libros tan buenos como éste que reseñamos hoy, El Diablo a todas horas del mismo autor, y sobre todo La Familia Mashber de Der Nister y Las Desventuras del Príncipe Sternenhoch de Ladislav Klíma que reseñaremos en otra ocasión-) y cuenta en sus primeras páginas de un mapa en el que nos sitúa la acción:
Son dieciocho los relatos que componen el libro los hay excelentes y muy buenos pero ninguno malo,- algo que me ha extrañado si comparo mi experiencia con Borges donde algunos me parecen excelentes y otros unos auténticos bodrios- que lo único que no tienen en común son los personajes -algunos aparecen en unos relatos y más tarde vuelven a aparecer-. Podríamos decir que tiene una estructura circular en la que los personajes que aparecen en el primer relato (excepcional, mientras lo lees parece que estás viendo un combate de boxeo que hace que te suba las pulsaciones a 150) vuelven a aparecer en el último pasados muchos años mostrándonos que en Knockemstiff el tiempo pasa pero todo sigue igual.
Algunos personajes que pertenecen a los más bajos fondos de la sociedad parecen filósofos de la vida en algunos momentos y dicen frases tan lapidarias como ésta:
"- Es lo que digo siempre Duane -dijo por fin con voz solemne-, un coño es un coño. Todos son buenos; lo que pasa es que algunos son mejores que otros" .
Sabio consejo de un padre a un hijo... Puede parecer un momento machista del relato pero lo que realmente esconde esta frase que le dice el padre al hijo es la resignación en la que viven en Knockemstiff llevado al último extremo, sabedores estos personajes de que ocupan el último escalón de la sociedad reconocen que la única opción que les queda para follar (que es de lo que trata este relato) es hacerlo con cualquier mujer por muchos defectos que tengan puesto que no pueden aspirar a más.
Por supuesto que aunque Pollock no haga mención de ello, imagino que las mujeres pensarían igual de los hombres de Knockemstiff...
En otros relatos los personajes nos muestra el desprecio hacia la cultura. Knockemstiff es un villorio racista y homófobo; pues bien en un momento dado un padre que teme que su hijo sea marica le espeta así a bocajarro:
"Tienes que dejar de leer libros- le aconsejó una mañana mientras estaban sentados a la mesa de la cocina. El viejo tenía una pinta espantosa; saltaba a la vista que acababa de tener una pesadilla chunga-. Empieza a ver más la tele."
Si el chico era marica lo era porque leía. En definitiva no solo había borrachos, violadores, y drogadictos es que además eran una caterva de analfabetos -claro que quizá ese era el motivo de que esos personajes fueran como eran-.
Y por último hay excelentes momentos humorísticos y es que estos DESGRACIADOS (y lo pongo en mayúscula porque lo eran con todas las letras) al menos nos hacen reír a ratos:
"Se imaginó en el manicomio que había sobre la colina de Athens, compartiendo una celda acolchada con el loco de su tío, intercambiando historias repugnantes sobre los viejos tiempos y discutiendo sobre quien la chupaba mejor, si Barbie o Ken".
Os dejo el teaser que realizó David Cauquil para el libro:
De estas veinticuatro imágenes dieciocho hacen referencia a los relatos podéis intentar adivinar de que va cada relato o aún más fácil podéis entrar en el siguiente enlace de David Cauquil pinchar sobre la imagen y leer unas breves palabras que hacen referencia al relato al que pertenece.
Leed el libro. No os defraudará.
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